domingo, 16 de octubre de 2011

Croquetas de chorizo de Teror con plátano

Hoy presentamos unas curiosas croquetas, jugando con el contraste dulce-salado, utlizando como ingredientes principales productos de las Islas Canarias, uno el más conocido por todos que es el plátano, caracteristíco por llevar motitas negras en su piel amarilla y el otro no es tan conocido, es el chorizo de Teror. Teror es un pueblo de las medianías de Gran Canaria, donde se elabora el típico chorizo que debe su nombre al pueblo. Se caracteriza por ser un chorizo de pasta blanda y fácil de untar, que está embutida. Las carnicerías de este pueblo que lo elaboran han heredado la receta de sus antepasados, el chorizo de Teror que más fama comercial tiene es el de "Los Nueces". Como curiosidad diremos que una sola carnicería hace a la semana unos 2.000 kilos de chorizo rojo por unos 70 kilos del blanco. El chorizo se elabora con las partes más gustosas de la carne del cerdo, que son: los cachetes de la cabeza, las pancetas, las paletillas, etc. Toda esa carne se tritura, se le añade vino blanco, ajo, sal y las especias: orégano, pimienta negra, pimienta blanca y pimentón (que es la especia que da el color anaranjado al chorizo rojo, el blanco no la lleva). La pasta resultante se deja fermentar un par de días y después se embute, la tripa natural se reservan para las morcillas dulces.

Los ingredientes necesarios, son:
  • 2 chorizos de Teror
  • 2 plátanos
  • 1 puerro mediano
  • 7 cucharadas de harina
  • Un poco de aceite de oliva
  • 1/2 l. de leche
  • Sal

Comenzaremos nuestra receta por lavar y cortar el puerro en brunoise (trocitos chicos). En una sartén ponemos un poquito de aceite de oliva, el puerro, un poco de sal y pochamos. Una vez esta pochado, tostamos la harina para que no quede sabor a harina cruda, depués añadimos los chorizos, sin la piel y con el fuego medio, para que no se nos queme pero suelte toda la grasa, por eso no ponemos más aceite. Después añadiremos la leche, es preferible que esté caliente para que no se nos hagan grumos al batir con la barilla, si se hicieran grumos, nos ayudaremos de la batidora manual. Ya solo queda añadir los plátanos cortados en daditos, no cortaremos con antelación ya que se oxida con rapidez y quedan negros. Daremos unas vueltas con el plátano ya añadido y colocamos nuestra masa en una fuente, preferiblemente plana y rectangular, ya que a la hora de envolver las croquetas podemos cortar de forma cuadrada o rectangular y nos ahorramos el estar dando la típica forma. Dejamos enfriar nuestra masa, la metemos en el frigorífico por lo menos toda una noche. A la mañana siguiente envolvemos nuestras croquetas, primero las pasamos por harina, huevo batido y pan rallado. Con esta receta salen alrededor de 15 croquetas, según el molde y el tamaño que las cortemos, en mi caso el molde era un plato hondo cuadrado. Freímos en aceite de oliva bien caliente, pasamos por una servilleta de cocina para quitar el exceso de aceite, emplatamos y llevamos a la mesa. Como consejo decir que podemos sustituir el chorizo de Teror por una sobrasada de Mallorca, es un contraste dulce-salado, aunque el chorizo de aquí le da un sabor característico pero a falta de él, la sobrasada también servirá, ante los problemas, buscar soluciones.