sábado, 2 de julio de 2011

Papas a la riojana

Hoy vamos a dar la receta de una rica, nutritiva comida y de fácil preparación para uno de esos días que tenemos prisas o estamos con otras cosas, además de tener que preparar la comida. Son unas ricas papas a la riojana, una forma diferente y divertida de comer este rico tubérculo. Como todo sabeis las papas vienen del Nuevo Mundo, más concretamente de Sudamérica,  fueron introducidas en Europa por los españoles en 1532 (trajeron la planta) cuando volvieron de la búsqueda de Las Indias, que lo que encontraron fueron las Américas, pero aunque parezca increíble no se empezó a añadir en nuestros guisos hasta finales del siglo XVIII. Como curiosidad diremos que los incas se comían las papas sancochadas a la parilla o soasadas sobre las brasas, nunca se pelaba ya que pensaban que si le quitabas la cáscara, lloraban. La verdad es que la papa ha ayudado a muchos países a que su población pudiera matar parte del hambre, como Irlanda, también en muchos países es el ingrediente principal en mucho de sus platos, como lo es en el la receta de hoy.


Para nuestra receta vamos a necesitar:

  • 5 papas medianas                   
  • 1 pimiento verde mediano
  • 1 cebolla mediana
  • 2 chorizos "jabuguitos"
  • 3 cucharadas de postre de pimiento choricero
  • 1 hoja de laurel
  • Aceite de oliva
  • Sal




Comenzaremos nuestra receta, la cual es para unas cuatro personas, por picar la cebolla en nuestra picadora, seguimos por cortar el pimiento verde en cuadraditos medianos, una vez que tenemos estos dos ingredientes, ponemos en un caldero un poco de aceite y primero ponemos a pochar la cebolla. Añadimos al mismo tiempo la hoja de laurel y un poco de sal para hacer sudar la verdura, cuando ha cogido un poco de color añadimos el pimiento verde, removemos de vez en cuando hasta que este pochada, cojemos las cucharadas de pimiento choricero y lo añadimos a nuestro guiso, dejamos que se fría un par de minutos a fuego medio, vigilamos que no se nos queme. Durante el tiempo de espera del pochado de la verdura, nos dedicamos a pelar las papas, también pelamos los jabuguitos y los cortamos en trozos, como de dos dedos de grosor, reservamos los dos ingredientes. Pasados los dos minutos agregamos nuestros jabuguitos y dejamos freír un par de minutos, hasta que veamos que el chorizo suelta parte de sabor, como consejo podemos decir que si no queremos añadir mucha grasa a nuestro plato, podemos freír en una sartén a parte, retirar la grasa y añadir el chorizo. Llega el momento de poner las papas, las cuales troncharemos con un cuchillo, quiero decir que no es un corte limpio si no que metemos el cuchillo y tiramos, oíremos un ¡crack!, con eso logramos que la papa suelte más almidón y haga que nuestra salsa se ligue. Una vez hemos tronchado todas las papas, solo queda cubrir con agua y esperar unos 25 minutos a que las papas se hagan y ligue la salsa. Llevamos a la mesa y servímos. La verdad es que no podemos hacer un plato más rico por menos dinero, es un plato el cual estamos obligados a recuperar del olvido de nuestra rica gastronomía. Podemos acompañar nuestro plato con un Rioja, ya que ayuda a combatir la grasa del plato y nos ayuda en la digestión.

viernes, 1 de julio de 2011

Coliflor a la gallega

La coliflor pertenece a la familia de las coles, contiene muy pocas calorías, ya que practicamente no contienen grasa y muy pocos hidratos de carbono. Son ricas en componentes depurativos, entre todos ellos destaca la vitamina C. Es un alimento adecuado para los regímenes de adelgazamiento y la acumulación de líquidos en el organismo, al tener un alto contenido en fibra, resulta interesante para aumentar la sensación de saciedad, siendo muy útil para combatir el estreñimiento y el colesterol, ya que la fibra tiene un efecto muy positivo. Nuestra receta de hoy es coliflor a la gallega, una forma diferente a lo que estamos acostumbrado, de fácil preparación, muy rica y nutritiva.


Para preparar nuestra receta, necesitaremos:


  • 1 coliflor mediana                                  
  • Unos dientes de ajos laminados
  • Pimentón dulce
  • Pimentón picante
  • Aceite de oliva
  • Sal


Comenzamos nuestra receta por preparar nuestra coliflor, retiramos el verde y nos quedamos con el cogollo blanco. Ponemos a hervir en un caldero con agua y un poco de sal, una vez que empieza a hervir, introducimos la col durante 20 minutos, dándole la vuelta a la mitad de la cocción para que se haga bien por los dos lados. Una vez que tenemos cocida la coliflor, repartimos en las raciones que vayamos a preparar. Llegado ese punto ya tendremos unos dientes de ajos laminados (la cantidad es relativa, ya que a quién le guste mucho pondrá más y al que le guste menos, pues menos), los cuales freímos con un poco de aceite de oliva, cuando ya están fritos añadimos una cucharadita de postre de pimentón dulce y a mí personalmente me gusta darle un poco de alegría, añadiendo una puntita de la cucharita de pimentón picante. Salseamos por encima con nuestro preparado, llevamos a la mesa y no lo dejamos enfriar ya que si no pierde gusto, ya que está más rica cuando aún está tibia.

jueves, 30 de junio de 2011

Canelones de atún

Hoy vamos  a mostrar una receta de tradición familiar por parte de mi abuela paterna y de su hermana, la tía Lola, que recuerdos,  son unos ricos y nutritivos canelones de atún. Siempre se preparaban en fin de semana, festivos o en alguna celebración especial, ya que son muy fáciles de hacer pero un poco elaborados y se tarda un rato en hacerlos. Son de orígen italiano y se han encontado documentos en  La Toscana, Sicilia  que datan del siglo XVI, decir que la forma de prepararlas no es la misma que la que todos conocemos, ya que la salsa bechamel es de orígen francés y se in cluyó años más tarde. El canelón es una pasta fina y cuadrada  que una vez que se hierve se rellena y se enrolla dándole forma tubular. Al parecer fué en el siglo XVIII cuando se incluyó la salsa bechamel, receta que rapidamente se extendió a la culturas gastronómicas como la francesa, la suiza y la belga. A España llegó en el siglo XIX y fué en Barcelona por medio de los grandes chefs italianos y suizos que trabajaban en los restaurantes más prestigiosos, así fue como los canelones se convirtieron en una comida burguesa que se disfrutaba los domingos y festivos. Todo el mundo habrá comido muchos canelones pero son los de la infancia los que nuestra memoria gustativa los tiene como nuestros favoritos, en mi caso los de atún de mi Yaya y de la tía Lola.


Los ingredientes para elaborar nuestros canelones son:

  • 12 placas de canelones        
  • 2 huevos duros
  • 1 lata de atún de 160 grs.
  • 1 cebolla mediana
  • 1 lata de pimiento morrón
  • 1 lata pequeña de aceitunas verdes sin hueso
  • Perejil
  • Pimienta negra
  • Salsa de tomate
  • Leche
  • Harina
  • Aceite de oliva
  • Nuez moscada
  • Sal


Comenzaremos nuestra receta por preparar un caldero con agua hirviendo y un chorrito de aceite para que las placas no se nos peguen, seguiremos las intrucciones del fabricante, ya que en el mercado ya las hay también de fácil cocción, ya vienen precocinadas y nos ahorraríamos este paso, pero como yo soy muy tradicional, soy fiel a la receta familiar. Al mismo tiempo ponemos los huevos a endurecer. Una vez que tenemos las placas, la sacamos del caldero y las vamos poniendo una a una en un paño de algodón para quitar el exceso de agua y después poderlos coger sin que se peguen. Mientras esperamos a que este la pasta cocida, procedemos a preparar el relleno y para ello, cortamos la cebolla en cuadraditos pequeños y la ponemos a pochar. Del mismo modo cortamos el pimiento morrón, las aceitunas las cortamos en rodajas finas y el atún lo desmigamos con un tenedor en una fuente, añadimos el pimiento morrón, las aceitunas, la cebolla pochada y revolvemos. Picamos un poco de perejil y pimienta molida, volvemos a revolver. Llega el momento de preparar una bechamel clarita, con un par de cucharadas de harina, leche, nuez moscada y sal. Una vez que ya tenemos la bechamel, añadimos un poco a nuestro relleno para que quede más jugoso, rellenamos los canelones y los enrollamos. En la fuente donde los vamos a hornear, colocamos un par de cacitos de bechamel en el fondo con el fin de que no se pegue, distribuimos nuestros canelones en la fuente y napamos con el resto de la bechamel, para terminar la elaboración solo queda poner un poco de salsa de tomate por encima. Llevamos al horno durante unos 20 minutos, pasado ese tiempo, los sacamos y llevamos a la mesa. Servimos y tendremos en cuenta antes de comerlos que guarda mucho el calor y nos podemos quemar. Las fotos de estos ricos canelones me las envía mi hermana Sonia que el otro día los preparó y me dió la idea de darlo a conocer a toda la gente que quiera prepararlos, si te gustan los canelones no dudes en prepararlos y ten la absoluta seguridad de que lo preparás muchas veces más.

miércoles, 29 de junio de 2011

Croquetas caseras

Somos muchos los que buscamos un bar que nos ofrezca unas buenas croquetas que nos hagan recordar a nuestra niñez, la comida de la mamá o de la abuela, rememorar alguno de nuestros mejores recuerdos al saborear una rica croqueta, y la verdad no suele ser tarea fácil encontrar el santuario de las croquetas, pero nosotros tampoco cejamos en el empeño y bar donde vamos, tapa de croquetas que pedimos, cruzando los dedos y deseando que esta tapa sea la buena. Hoy vamos a dar la receta para que tu misma te puedas hacer unas ricas croquetas caseras de pollo y jamón.

Los ingredientes que vamos a necesitar son:

                                                   
  • 1 punta jamón ibérico
  • Media pechuga de pollo
  • 1/2 litro de leche
  • 1 cebolla pequeña
  • 4 cucharadas soperas de harina
  • Nuez moscada
  • Sal
  • 2 huevos
  • Pan rallado
  • Aceite de oliva


Comenzaremos a elaborar nuestra receta, hirviendo el pollo (podemos utilizar restos de cualquier parte del pollo, yo doy por sentado en la receta que no tenemos restos) y cortando en cuadraditos pequeñitos la punta de jamón. Una vez hervida la pechuga, la picamos en nuestra picadora. La juntamos con el jamón y reservamos. En una sartén pochamos la cebolla que previamente hemos picado en cuadraditos pequeñitos, retiramos el exceso de aceite, dejando en la cebolla que se vea bastante brillante del aceite, decir que podemos hacer la bechamel con mantequilla, pero con el aceite es más sano. En la sartén añadimos las cucharadas de harina y dejamos que se tueste un poco la harina para que no sepa al quedarse cruda. Despues añadimos la leche y con la ayuda de una barilla vamos batiendo, añadimos un poco de nuez moscada y salamos. Seguimos batiendo hasta que hierva y espese, cuando esto ocurra introducimos el pollo y el jamón en nuestra bechamel, damos unas cuantas vueltas hasta que se nos quede una masa uniforme. La colocamos en un plato o en una fuente y esperamo a que se enfríe. Una vez tenemos la masa fría en nuestro recipiente, lo introducimos en el frigorífico, lo ideal es hacerlo de un día para otro ya que así podremos moldear la masa. Pasado el tiempo de espera, sacamos nuestra masa del frigorífico y con dos cucharas soperas moldeamos nuestras croquetas que vamos colocando en una tabla, ya solo nos queda batir los dos huevos, pasar las croquetas y terminamos recubriéndolas con pan rallado. Las croquetas una vez terminadas las vamos colocando en una tartera y separaremos los pisos con una servilleta de papel. Lo mejor es congelarlas para a la hora de freírlas no se nos abran. Y a la hora de freírlas tener en cuenta que el aceite esté muy caliente y a ser posible que el aceite cubra toda la croqueta, lo ideal para freír es un cazo ya que cubre y no tenemos que gastar mucha aceite. Una vez fritas, llevamos a la mesa y servimos, cuidado que guardan mucho el calor y nos podemos quemar.

martes, 28 de junio de 2011

Corvina a la plancha

La corvina es un pescado blanco muy bajo en grasa, unas 84 calorías por cada 100 grs., al estilo de la lubina. Hay veces que en el mercado lo podemos encontrar en rodajas, ya que puede llegar a medir hasta 2.00 m. de longitud, también posee una amplia familia, hay más de 250 especies. Es un pescado al que le van técnicas sencillas como el vapor o la plancha con un buen aceite de oliva. Como se puede leer en el título del post, hoy lo presentamos a la plancha.

Los ingredientes de la receta son:
                                                                                                
  • Filetes de corvina
  • Ajos laminados
  • Limón
  • Aceite de oliva
  • Sal

Es una fácil y rica receta, comenzaremos por laminar unos ajos, los cuales frreímos y reservamos. En una sartén ponemos un poco de aceite de oliva, una vez caliente ponemos los filetes de corvina, a los cuales les ponemos un poco de sal y damos la vuelta para que se hagan los dos lados. Cuando están a medio hacer les echamos un poco de zumo de limón que exprimimos directamente sobre el pescado. Una vez que veamos doradito los filetes ya están listos, los ponemos en una fuente, calentamos los ajos y se los ponemos por encima. Solo queda llevar a la mesa y servir , como consejo decir que se ha de comer lo antes posible, ya que si se queda frío pierde mucho. También podemos comentar que cuando compremos la corvina, le decimos al pescadero o pescadera que nos ponga aparte la espina, la ventrecha (vientre de los pescados) y la cabeza, con la cual podemos sacar un caldo, ya bien sea para una paella, una fideúa, un caldo de pescado, escaldón de gofio, etc., en definitiva la base caldosa para que prepares el plato que más te guste.

domingo, 26 de junio de 2011

Arroz a la naranja

No es paella, pero es una variante de arroz típica para un domingo, un rico arroz a la naranja. Como curiosidad diremos que el arroz se debe cocinar en extensión y no en altura, teniendo en cuenta que el fuego llegue de una manera uniforme a nuestra paellera. La receta que vamos a dar a continuación es para cuatro personas. 

Los ingredientes para nuestro arroz a la naranja son los siguientes:

                                                                                                 
  • 500 grs. de arroz redondo                         
  • 1 pimiento verde
  • 1 cebolla mediana
  • 4 cucharadas soperas de tomate frito
  • 16 gambas o langostinos medianos
  • 1 bote de aceitunas
  • 1 naranja para decorar
  • Zumo de naranja
  • Caldo de verduras
  • Unas hebras de azafrán
  • Aceite de oliva
  • Sal




Comenzamos nuestra receta preparando la fritura con la cebolla y el pimiento verde bien picado y puesto a pochar con un poco de aceite de oliva, mientras se pocha, pelamos las gambas o langostinos, con las cabezas y las cáscaras hacemos un fumé en un caldero con un poco de agua hasta que hierva, colamos y reservamos hasta la hora de echar el caldo. Una vez pochada la verdura ponemos nuestras hebras de azafrán damos unas vueltas y tendremos el cuidado de que no se nos quemen, después añadiremos las cucharadas de tomate frito, esperamos un par de minutos sin dejar de remover. Llega el momento de poner el arroz, pondremos un vaso cada dos comensales (suponemos que cada vaso son 250 grs), en nuestro caso dos vasos, lo ponemos sin lavar y rehogamos un poco. Ahora toca el momento de poner el líquido, para ello pondremos un vaso de zumo de naranja, el fumé y lo que resta hasta los cuatro vasos, se los ponemos de caldo de verduras, removemos todo y ya no volveremos a mover el arroz. Ponemos la sal y las aceitunas. Solo nos queda añadir nuestras gambas o langostinos pero no lo haremos hasta que el arroz esté casi hecho y veamos que casi no queda caldo. Una vez tenemos nuestro arroz, cortamos la naranja en rodajas y después las cortamos a la mitad para decorar la paellera donde tenemos el arroz, taparemos con un paño unos 5 minutos para que el arroz repose. Si nos gusta el socarrat o socarrao, para entendernos el quemadito, pondremos a fuego vivo 1 minuto para que se haga la costra del quemadito, cuando veamos que ya casi no tenemos líquido. Pasado los 5 minutos de reposo solo queda llevar a la mesa y servir. Al que le guste la naranja, podemos acompañar el plato con las rodajas de la decoración. Como opción, tendremos acabar nuestro arroz al horno, lo introduciremos cuando veamos que el líquido casi está evaporado y antes le colocaremos nuestras gambas. Decir que si queremos podemos utilizar arroz integral, para ello tener en cuenta que va a nacesitar más agua y tardará en hacerse un poc más